La enseñanza de la historia, en su vertiente más tradicional ha centrado su atención en figuras mayoritariamente masculinas, mientras que el aporte femenino parece algo constante y de importancia sólo a partir del siglo XIX. No obstante, un minucioso recorrido por la historia europea desde la Edad Media hasta el Barroco nos descubre numerosos documentos que dan cuenta del talento de las mujeres que lucharon por liberarse de los preceptos machistas que, aún hoy, siguen dominando la historia y la vida de muchas sociedades.