26. ¿Cuál es el origen de las risas enlatadas en televisión?

Es habitual en ciertas series y comedias de situación que las escenas cómicas se refuercen con unas risas de fondo que pretenden simular a un público presente, pero que en realidad son grabadas: las conocidas risas enlatadas.

Anteriormente a la aparición de la televisión las obras de teatro y programas de radio ya se realizaban en directo y con público. Al aparecer la televisión se pretendió emular esta situación, para que los espectadores se sintieran más familiarizados con este nuevo formato, añadiendo a los programas grabados risas enlatadas (dado que las grabaciones se protegían guardándolas en estuches de lata). Éstas también se utilizaban aunque la grabación fuera con público en directo, ya que así se controlaba la reacción del público a voluntad, dándole a las risas la duración y la intensidad deseada.

Se dice que el primer programa de televisión en usar risas grabadas fue The Hank McCune Show en 1950.

Charlie Douglas, un ingeniero de sonido, desarrolló con posterioridad una máquina (la llamada Laff Box) que no sólo reproducía risas, sino quejidos, suspiros, aplausos y todo tipo de reacciones, incluso risas de gente de otras culturas, cuyo sonido era bien diferente a los americanos.

Esta técnica de edición se conocía como sweetening [endulzar].