(12+1). Ni te cases, ni te embarques

Cuando el martes cae en 13 los trezidavomartiofóbicos sufren por su miedo irracional a este día. Evidentemente también echan a temblar todos aquellos que son sólo triscaidecafóbicos (véase 12+1 de enero). Todos ellos tienen entonces una razón para intentar justificar o echar las culpas de todo lo malo que les pueda ocurrir en esa jornada.

Pero la trezidavomartiofobia es una patología que debe ser atendida por especialistas. Sus afectados pasan este día con ansiedad, miedo e inseguridades que van mucho más allá de la simple superstición.

Pero ¿cuál es el origen de este odio a esa fecha? ¿Por qué un día como éste es tan temido y es uno de los más odiados por los supersticiosos?

Por un lado nos encontramos con el trece, un número que ha sido calificado como un maldito por diversos motivos. Trece eran los asistentes a la Última Cena (Jesucristo mas los doce apóstoles). Trece son los espíritus malignos que se citan en la Cábala judía. Trece es el capítulo asignado al Anticristo en el libro bíblico del Apocalipsis. Y trece es el número de la carta de la Muerte en la baraja del tarot.

El martes era el día que dedicaban los romanos al dios Marte (Ares en la mitología griega), el dios de la Guerra. Su planeta era el planeta rojo, el de la destrucción, la sangre y la violencia. Durante la Edad Media era conocido como «el pequeño maléfico».

La mezcla de ambos hace que para mucha gente se convierta en un mal día, aplazando viajes, desplazamientos, reuniones, operaciones, firma de contratos, etc…

Curiosamente, en la cultura anglosajona el día elegido para la mala suerte es el viernes 13 (día al que se han consagrado una extensa colección de películas y novelas).