JO NESBØ (Oslo, Noruega, 1960). Nació en una familia de lectores y cuentacuentos. Desde pequeño impresionaba a sus amigos con historias de fantasmas. A los 17 años quería ser jugador profesional de fútbol y descuidaba sus estudios, pero su sueño terminó con una rotura de ligamentos y se encontró con unas notas medias que le impedían elegir la carrera que quería. Ingresó en el ejército y fue destinado al norte de Noruega. Allí completó sus estudios y en 3 años tenía las notas necesarias para estudiar Económicas en Bergen. Durante esa época tocaba como guitarrista de una banda heavy y empezó a escribir canciones.
Tras licenciarse se trasladó a Oslo. De día trabajaba como broker y por la noche tocaba en un famoso grupo de música, Di-Derre. Tanta presión le terminó por agobiar, se tomó 6 meses de excedencia y se marchó a Australia con su portátil con la idea de escribir un relato sobre la vida en la carretera de un grupo de música.
Pero en el viaje de 30 horas empezó a escribir una historia de amor y muerte, la de un tipo llamado Harry que aterriza en Sydney… escribió y escribió, ignorando el hambre y el sueño, hasta que terminó su manuscrito, Flaggermusmannen. En 1997 de vuelta en Oslo lo presentó a una editorial con seudónimo para no beneficiarse de su fama de estrella del pop.
Su padre murió al poco de jubilarse, sin realizar su sueño de escribir sobre la II Guerra Mundial. Esto hace que Nesbø se replantee su modo de vida y decide no reincorporarse al trabajo. A las pocas semanas recibe la propuesta de una editorial para publicar su libro, que ganará varios premios en 1998. Mientras, viaja a Bangkok para escribir su segunda novela, Kakerlakkene. Petirrojo es la tercera y en ella recreará la historia que su padre no pudo escribir. Con este libro consigue un gran éxito de crítica y público. Actualmente es uno de los autores más reconocidos de la narrativa policíaca nórdica.
Por las noches cuenta cuentos a su hija, alguno de los cuales se han convertido en libros infantiles.
En la actualidad cuenta con más de 25 millones de ejemplares vendidos en todo el mundo. En 2011 se colocó por delante de Stieg Larsson en Inglaterra, donde se calculó que cada 57 segundos se vendía un libro suyo. También en Inglaterra ha llegado a tener de forma simultánea cuatro títulos entre los más vendidos, y en Italia, Noruega, Suecia, Alemania, Polonia y Estados Unidos se ha mantenido durante semanas en las listas de best sellers.
Ha ganado prácticamente todos los grandes premios, como el Glass Key Award, el Riverton Prize y el Norwegian Bookclub Prize.
Sus novelas se han traducido a cuarenta idiomas y los derechos cinematográficos se han vendido a los mejores productores.