De camino a la casa de Boone, Johnny lo llama al móvil unas cuantas veces, pero el gilipollas no responde.
Típico de Boone: se mete en su chabolo, que viene a ser su cueva, y se olvida del resto del mundo; ni siquiera contesta al teléfono. Johnny llega hasta el Muelle de Cristal. La Segunda está allí, de modo que Johnny se acerca a la puerta y llama. Boone no responde. Johnny da la vuelta y aporrea las ventanas.
Boone no aparece.
Johnny llama a David.
—¿Has visto a Boone?
—Tío, hace mucho que no veo a Boone.
—Ya —dice Johnny—, pero ¿tienes idea de dónde puede estar?
—Prueba en casa de la inglesa.
Johnny se dirige hacia la casa de Petra.