SE toma un cuartillo de flor de nata, se bate por espacio de dos horas con un batidor hasta que esté bien espeso, aparte se baten tres claras de huevo a punto de merengue, y a éstas se les pone la cantidad de azúcar al paladar. En una fuente redonda se ponen tres onzas de melindros, y cuando la nata y las claras estén bien unidas se echa por encima de los melindros, se polvorean de grageas u otros confites. Es exquisito. También se vende la nata montada.