Capítulo 6 : Badajoz
[1] La eficacia de la aviación pudieron comprobarla por fin los republicanos cuando el II Tabor de Tetuán al mando de Castejón fue destrozado entre Santa Amalia y Medellín solo unos días después de la toma de Badajoz. Era el primer bombardeo que sufrían desde su llegada a Cádiz. Véase Julián Chaves Palacios, La guerra civil en Extremadura. Operaciones militares (1936-1939), Editora Regional, Mérida, I997, p. 122. <<
[2] Antonio Bahamonde Sánchez de Castro, Un año con Queipo. Memorias de un nacionalista, Ediciones Españolas, Barcelona, 1938, p. 117.<<
[3] Asunción Delgado Serrano, que trabajaba allí, declaró a la autoridad militar que el saqueo fue iniciado por los Regulares y el Tercio en la tarde del 14 de agosto, continuando por la noche todo el que quiso. Cuando ella se acercó el día 15, sólo quedaban cartones y cristales rotos.<<
[4] Para elaborar esta breve semblanza biográfica de Manuel Gómez Cantos han sido consultados: José Courceiro Tovar, Hombres que decidieron (17 a 22 de julio de 1936), Ed. Rollán, S. A., Pinto, 1969; Fernando Alcalá Marín, Marbella, Segunda República y Guerra Civil, Ed. del Autor, 1988; Jacinta Gallardo Moreno, La guerra civil en La Serena, Diputación Provincial de Badajoz, Badajoz, 1994; Julián Chaves Palacios, Huidos y maquis. La actividad guerrillera en la provincia de Cáceres, 1936-1950, Diputación Provincial de Cáceres, Cáceres, 1994; Miguel López Corral, «Los fusilamientos de Mesas de Ibor», Historia 16, n.º 251, 1997; AA. VV., Badajoz, agosto de 1936, Federación Socialista de Badajoz, Badajoz, 1997, y Lucía Prieto Borrego, La guerra civil en Marbella. Revolución y represión en un pueblo de la costa, Servicio de Publicaciones de la Universidad de Málaga, Málaga, 1998. También han sido útiles diversos documentos del Servicio Histórico Militar referentes a su salida de Marbella en 1936 y a sus actividades en Huelva, reflejadas ya en mi trabajo sobre la guerra civil en dicha provincia, y la colaboración siempre amable del investigador Carlos Engel y su magnífico archivo. También su Hoja de Servicios, con la que he contado gracias a la amabilidad de Moisés Domínguez Núñez. <<
[5] Por aportar algo más a su desconocida biografía, añadiré que Ildefonso Puigdengolas, que estuvo en agosto de 1932 en Sevilla y en el verano de 1936 en Badajoz, se hallaba en Sevilla ya en la primavera de 1931 como Jefe de la Guardia de Seguridad y que en octubre de 1934 se encontraba en Málaga, de donde fue alejado por deseo de un grupo de oficiales de derechas. <<
[6] Luis Pía Ortiz de Urbina, «Testimonios y puntualizaciones», en El fascismo sobre Extremadura. Badajoz, 1936, Federación Socialista de Badajoz, Badajoz, 1997, p. 93 y ss. <<
[7] Los informes se referían a Madroñero, José García Sito, Benito Higuero Lairado, Eladio López Alegría, César Moratinos, Manuel Ruiz Lozano, Crispiniano Terrón, José Villarreal Muñoz, José Bizarro Gallego (todos fusilados); y Vicente Campini Fernández, Pedro Cienfuegos Bravo, Jesús María Domínguez Agudo, Eloy Domínguez Marín, Salvador Sanguino, Joaquín Lozano Jurado y Guillermo Viñuelas (unos huidos y otros sin inscribir). <<