Iten ablareis de los hechos de la Inquisición e diréis los males de los desordenes que haze en este reyno el Inquisidor y los sus comissarios sobre todo en el modo de progessar y que apellar no hemos podido ni podemos y que nesta ciudad reyna del mundo la mayor confusion y que el Inquisidor junto con todos los sus oficiales no busca otra cosa mas que robar dinero.
Iten diréis que no consentiremos nunca esta Inquisición.
El Senado de Palermo a Antonello Lo Campo, embajador en la corte de Carlos V.