En la revista Diabetes Care de diciembre del 2003, apareció un informe inesperado procedente de Pakistán. Según el artículo, una cucharadita de canela diaria puede mejorar los niveles de grasa y de glucosa en la sangre de los pacientes con diabetes tipo 2. El estudio se realizó entre 60 personas, divididas en grupos que recibieron 1, 3 o 6 gramos de canela diarios, o un placebo que no contenía canela. Este proceso se repitió durante 40 días.
Los resultados mostraron una reducción considerable del nivel de glucosa en la sangre, los triglicéridos, el colesterol total y el colesterol LDL, incluso en dosis de 1 gramo, mientras que el grupo que tomó el placebo no presentó cambios. Ninguno de los participantes tuvo problemas para consumir la canela. El autor del estudio considera que incluso en cantidades más pequeñas, la canela puede ser útil para reducir tales niveles.
Este parece ser un tratamiento bastante benigno, que vale la pena probar.
En otro artículo publicado en Diabetes Care, esta vez en junio del 2003, se sugiere que el uso del té oolong, un tipo de té parcialmente fermentado, permite una reducción considerable de la glucosa plasmática. (En comparación, el té verde no se fermenta, y el té negro se fermenta completamente). Como parte del estudio, 20 personas tomaron diariamente 1500 mililitros de té oolong y su nivel de glucosa bajó de 229 a 162, como promedio. El grupo que no tomó el té no mostró cambios. El té que se usó en la prueba era procedente de China.
¿Recomiendo este tratamiento? Al igual que en el caso anterior, este tratamiento parece benigno y sus posibles efectos son magníficos. El principal problema es conseguir el té; si lo encuentra, asegúrese de que viene de China.