Pensar en un seguro de cuidados a largo plazo

Cada vez vivimos más, sobre todo los que padecemos de diabetes. Y vamos a tener que encontrar la forma de pagar por nuestro cuidado cuando las primas de un seguro médico estén fuera de nuestro alcance económico. A los 90 años, probablemente su cónyuge de 88 años no esté en condiciones de pagar por el seguro de usted, ni tampoco su hija de 65. El Medicare no cubre la mayor parte de sus gastos de cuidados a largo plazo. El Medicaid sí cubre algunos cuidados a largo plazo, pero no todo lo que tal vez necesite. Ahí es donde un seguro de cuidados a largo plazo puede resultar útil, cuando uno puede costearlo.

Si usted tiene mucho dinero y quiere protegerlo del impacto de una enfermedad prolongada, le conviene tener un seguro de cuidados a largo plazo. Si sus ingresos son limitados, pagar las primas durante muchos años agotará sus ahorros, y hasta quizá tenga que abandonar el seguro antes de usarlo.

Un gran problema es que muchas compañías que venden seguros de cuidados a largo plazo no aceptan a personas que padecen de diabetes. Sin embargo, mientras está trabajando tal vez pueda obtener este tipo de seguro como parte de un grupo grande, por lo que no van a reparar en su enfermedad particular. En ese caso las primas son relativamente más económicas, pero se mantendrá pagando por mucho más tiempo que si compra la póliza de seguro a una edad más avanzada.

Antes de decidirse a comprar una póliza de cuidados a largo plazo, tenga en consideración los siguientes elementos importantes:

¿Qué factores activan los beneficios? Es decir, ¿qué limitaciones físicas deben estar presentes para que el seguro comience a pagar? Para evaluar esto, las compañías de seguros tienen en cuenta si el individuo puede realizar por sí solo actividades cotidianas como bañarse, vestirse, comer, ir al baño y levantarse de la cama. Cuando la persona es incapaz de hacer una o más de estas actividades sin ayuda, la compañía de seguros inicia el pago de beneficios.

¿Qué parte del costo del cuidado pagará el seguro, una parte o todo?

¿Qué niveles de atención proporciona la póliza? Algunas pólizas cubren solamente los servicios de cuidado diurno, mientras que otras pagan incluso por los gastos de un hogar de ancianos.

¿La póliza contiene una cláusula de exoneración de primas, de manera que usted no tenga que seguir pagando si queda incapacitado?

¿La póliza tiene garantía de renovación, de manera que pueda renovarla, la haya usado o no, aunque las primas serán más altas?

Haga lo que haga, si compra uno de estas pólizas, cerciórese de cuidar bien su salud. Así vivirá el tiempo suficiente para sacarle algún provecho al seguro.