Aproveche los conocimientos a su alcance

Por lo general, las personas están deseosas de ayudarlo con su diabetes. (Vea el Capítulo 11 para obtener más detalles sobre sus actores secundarios). De manera que el conocimiento está allí, esperando a que lo aproveche. Las compañías de seguros reconocen el valor de recursos como los dietistas y los educadores de la diabetes, y por lo general están dispuestas a pagar por ellos.

Puede obtener mucha información gratis de su amable farmacéutico, de la Internet y de otras personas con diabetes. Pero sea cauteloso con estos dos últimos grupos. En la Internet se propaga información incorrecta, y lo mismo ocurre entre pacientes diabéticos. Antes de hacer un cambio importante en su tratamiento, basándose en información incierta, verifique con su médico. (En los Capítulos 17 y 19 me refiero a algunas de las informaciones erróneas que comúnmente circulan acerca de este padecimiento).

Cuando tenga una pregunta sobre la diabetes, anótela y llévela a su próxima consulta, a menos que sea urgente. Si no sabe si algo es urgente, llame a su médico y deje que sea él quien determine la urgencia de su problema.

No reste importancia a la ayuda de familiares y amistades. Son las personas que lo quieren y saben que usted también les tendería una mano si las cosas fueran al revés. El problema es que no lo pueden apoyar si no saben lo que usted está viviendo. Dígales que tiene diabetes y póngalos al tanto de cuáles son los riesgos que encara como, por ejemplo, la hipoglucemia. Explíqueles cómo lo deben ayudar si hiciera falta. Descubrirá que el resultado será una relación mucho más entrañable.