Insulina

Si tiene diabetes tipo 1, la insulina es su salvación. Si tiene diabetes tipo 2, posiblemente necesitará insulina en las etapas más avanzadas de su enfermedad. La insulina es un gran medicamento, pero la mayoría de las personas tienen que administrárselo con una aguja, y ahí está la dificultad (o el dolor). Los inventores han creado muchas formas distintas de administrar insulina, pero el método de la jeringuilla y la aguja ha sido la norma por tanto tiempo que la mayoría de los pacientes siguen utilizándolo. En esta sección, les hablo de los métodos más nuevos, que por lo menos debe considerar, ya que son más fáciles y posiblemente más exactos que el método viejo. Sin embargo, las nuevas jeringuillas y agujas son prácticamente indoloras.

Hasta hace unos años, la insulina sólo se podía obtener extrayéndola del páncreas de la vaca, el cerdo, el salmón u otro animal. Esto no era del todo satisfactorio, ya que esas insulinas son ligeramente distintas de la insulina humana. Su uso provocaba una reacción inmunológica en la sangre y ciertas reacciones en la piel. El preparado se purificaba, pero siempre quedaban cantidades diminutas de impurezas. En 1978, los investigadores lograron modificar la bacteria llamada E coli para que produjera insulina humana. Casi toda la insulina que se utiliza ahora es insulina humana perfectamente pura, y pronto no habrá más insulina que la humana.

Anteriormente, la insulina venía en dos tipos de dosis, U40 y U80, que significa 40 unidades por mililitro u 80 unidades por mililitro. Era confuso, sobre todo si se usaba la jeringuilla equivocada: había que utilizar la jeringuilla de 40 unidades para la insulina de 40 unidades. Para eliminar la confusión, toda la insulina en los Estados Unidos es actualmente U100 (100 unidades por mililitro), y todas las jeringuillas son U100. Esta uniformidad no necesariamente se encuentra en Europa o en otros países, de modo que debe verificar la potencia de la insulina y revisar las indicaciones que vienen con la jeringuilla.

En el cuerpo humano, la insulina está respondiendo constantemente a los altibajos del nivel de glucosa en la sangre. Actualmente no existe un dispositivo sencillo que sea capaz de medir la glucosa en la sangre y suministrar insulina de la forma que lo hace naturalmente el páncreas. Con el propósito de evitar muchas inyecciones al día, se inventaron formas de insulina que funcionan a distintas horas. Estas son:

Insulina lispro de acción rápida: La insulina lispro (llamada insulina Humalog por su fabricante, Eli Lilly) empieza a bajar la glucosa a los cinco minutos de haber sido administrada, alcanza su efecto máximo aproximadamente en una hora, y deja de estar activa en unas tres horas. La lispro es un gran adelanto porque la persona diabética no tiene que ponerse la inyección justo cuando va a comer. Con la anterior insulina de acción rápida (insulina regular), cuando la persona se ponía la inyección, tenía que ingerir alimentos en un plazo de 30 minutos, o corría el riesgo de presentar hipoglucemia. Como su actividad empieza y termina tan rápidamente, la lispro no causa hipoglucemia con tanta frecuencia como los preparados antiguos.

Novo Nordisk ha creado la insulina aspart (llamada NovoLog), cuyas características son idénticas a las de la insulina lispro.

Insulina regular de acción rápida: La insulina regular tarda 30 minutos en empezar a bajar la glucosa, alcanza su efecto máximo en 3 horas, y desaparece en un lapso de 6 a 8 horas. Hasta que se inventaron la Humalog y la NovoLog, los pacientes usaban este preparado antes de las comidas para mantener la glucosa baja hasta la siguiente comida.

Insulina lenta o insulina NPH de acción intermedia: Ambas empiezan a bajar la glucosa en el transcurso de las 2 horas posteriores a la inyección, y continúan su actividad por 10 o 12 horas. Pueden mantenerse activas hasta por 24 horas. El propósito de esta clase de insulina es proporcionar un nivel uniforme de control durante medio día, de manera que en el cuerpo siempre haya un nivel bajo de insulina activa. Con esto se intenta igualar lo que ocurre en el cuerpo humano.

Insulina ultralenta de acción prolongada: Esta insulina empieza a actuar en un lapso de 6 horas y proporciona un nivel bajo de actividad de la insulina hasta por 26 horas. Se inventó para ofrecer un nivel basal uniforme de control, y requiere una sola inyección al día. Puede actuar de distinta manera en cada persona, y en algunos pacientes funciona más bien como una insulina de acción intermedia.

Insulina glargina de acción prolongada: Aventis vende una insulina llamada insulina glargina o Lantus. Los estudios han demostrado que la insulina glargina comienza a hacer efecto de 1 a 2 horas después de la inyección, y su actividad dura 24 horas, sin un momento específico de actividad pico, que es exactamente lo que hace falta para controlar el nivel de glucosa en la sangre durante todo el día. La insulina glargina se libera de una manera uniforme desde el lugar de la inyección, independientemente de la parte del cuerpo en que se inyecte. Como su actividad es uniforme y predecible, la insulina glargina no suele provocar un descenso del nivel de la glucosa en la sangre por la noche, algo que sucede a menudo con la insulina NPH. He usado esta insulina en varios pacientes con diabetes tipo 1 y han quedado muy complacidos con los resultados. Ahora la uso con todos los pacientes nuevos de diabetes tipo 1. Una desventaja de la insulina glargina es que no se puede mezclar con otras insulinas en una jeringuilla.

Si con la insulina NPH no logra que su control de la diabetes sea bueno (definido como hemoglobina A1c del 7 por ciento o menos), pídale a su médico que considere la insulina glargina.

Insulinas premezcladas: Hay varias mezclas disponibles: 70 por ciento de insulina NPH y 30 por ciento de insulina regular; 50 por ciento de insulina NPH y 50 por ciento de insulina regular; 75 por ciento de insulina NPH y 25 por ciento de insulina lispro, y 70 por ciento de insulina NPH y 30 por ciento de insulina aspart. Estas mezclas son útiles para personas a las que les cuesta trabajo mezclar las insulinas en una jeringuilla, tienen problemas de la vista o utilizan siempre el mismo preparado.

Es importante que conozca varios puntos que son comunes en todas las insulinas:

La insulina se puede mantener a temperatura ambiente por cuatro semanas, o en el refrigerador hasta la fecha de vencimiento impresa en la etiqueta. Al cabo de cuatro semanas a temperatura ambiente, debe desecharse.

La insulina no soporta muy bien el calor excesivo, como la luz directa del sol, ni tampoco el frío excesivo. Proteja su insulina contra esas condiciones.

La insulina se puede inyectar a través de la ropa, sin peligro alguno.

Si se administra menos de 50 unidades en una inyección, hay jeringuillas de ½ cc que facilitan medir hasta 50 unidades. Si administra menos de 30 unidades, puede usar jeringuillas de 3/10 cc.

Las agujas más cortas pueden ser más cómodas, especialmente para los niños, pero la profundidad de la inyección influye en la rapidez con que funciona la insulina.

Las jeringuillas desechables se pueden usar un par de veces.

Las jeringuillas y las agujas usadas deben colocarse en un envase a prueba de pinchazos, herméticamente cerrado, antes de echarlas a la basura.