Es posible que su médico prefiera un medidor específico porque a través de un programa de computadora puede descargar los resultados de las pruebas y mostrarlos en una forma específica. Esto es muy útil para decidir cómo modificar su tratamiento con el propósito de que pueda controlar mejor su nivel de glucosa.
El medidor que compre debe registrar la hora y la fecha, para que esa información quede guardada junto con el resultado de la prueba. Asegúrese de que la memoria permita almacenar por lo menos 100 lecturas de glucosa, si se hace la prueba cuatro veces al día. Con esa frecuencia, 100 lecturas representan 25 días de pruebas.
No compre un medidor que no permita descargar los resultados a un sistema de manejo de datos por computadora. Cuando vaya a la consulta de su médico, lleve el medidor para que él o un asistente pueda descargar los resultados de sus pruebas de glucosa y evaluarlos con la ayuda de un sistema de manejo de datos. Evaluar páginas de lecturas de glucosa anotadas en una libreta es prácticamente imposible.
Es posible que su compañía de seguros solamente le autorice un medidor específico, y en ese caso tal vez no tenga otra opción.
Hágase las siguientes preguntas antes de decidirse por un medidor:
✔ Si lo va a usar un niño pequeño, ¿podrá usar con facilidad el medidor y las tiras?
✔ ¿Utiliza baterías comunes o caras y difíciles de conseguir?
✔ ¿El medidor tiene una memoria que usted y su médico pueden revisar?
✔ ¿La información guardada en el medidor se puede descargar a un programa de computadora?
✔ ¿El costo de las tiras de prueba es razonable?