Desarrollar diabetes tipo 2

La herencia genética causa diabetes tipo 2, pero factores ambientales como la obesidad y no practicar ejercicios desencadenan el padecimiento. Las personas con diabetes tipo 2 son resistentes a la insulina antes de volverse obesos o sedentarios. El envejecimiento, los hábitos deficientes de alimentación, la obesidad y no hacer ejercicios se combinan y dan lugar al inicio de la enfermedad.

La herencia parece ser un factor mucho más fuerte en la diabetes tipo 2 que en la diabetes tipo 1. Tenga en cuenta lo siguiente:

Si su padre tiene diabetes tipo 2, pero su madre no, usted tiene aproximadamente 4 por ciento de probabilidades de adquirir la enfermedad.

Si su madre tiene diabetes tipo 2 pero su padre no, sus probabilidades de adquirir la enfermedad son aproximadamente 10 por ciento.

En casi 100 por ciento de los casos, el gemelo idéntico de una persona con diabetes tipo 2 termina adquiriendo la enfermedad.

Si su hermano o hermana (que no es un gemelo idéntico) adquiere diabetes tipo 2, usted tiene aproximadamente 40 por ciento de probabilidades de adquirirla.

Este es un dato interesante: los cónyuges de personas que padecen de diabetes tipo 2 tienen mayor riesgo de desarrollar la diabetes y deben someterse a análisis para detectar la enfermedad igual que si fueran familiares diabéticos. ¿Por qué? Porque comparten los mismos factores de riesgo ambientales, como una dieta deficiente y un estilo de vida sedentario.

Algunos signos de alerta temprana aparecen en la población que tiene más probabilidades de desarrollar diabetes tipo 2. Las personas con diabetes tipo 2 a menudo tienen una historia de malnutrición en edades tempranas. Tal vez estos individuos no produjeron suficientes células productoras de insulina cuando eran jóvenes, debido a que no las necesitaban pues su consumo de alimentos era reducido. Cuando alguien con estas características finalmente tiene acceso a gran cantidad de alimentos —a una edad más avanzada—, sus páncreas tal vez no cuente con suficientes células productoras de insulina para hacerle frente a la carga.

En los países en desarrollo, donde a menudo los alimentos escasean, aquellas personas cuya constitución genética permite que sus organismos utilicen los carbohidratos de una manera muy eficiente tienen una ventaja en comparación con el resto de la población, porque pueden sobrevivir con pocas cantidades de alimentos y calorías. Sin embargo, si estas personas más tarde en la vida tienen acceso a grandes cantidades de comida, sus organismos se abruman y es muy probable que engorden, se vuelvan sedentarios y desarrollen diabetes. Esto tal vez explique por qué las personas que viven en países en desarrollo tienen más riesgos de desarrollar diabetes tipo 2. Estudios de población demuestran que la incidencia de diabetes es más elevada en países en vías de desarrollo como China e India.