Hemos incluido las recetas de algunos de los pasteles que salen en la novela para acercar a los lectores los sabores de la repostería alemana y para que puedan preparar una merienda inspirada en las de las protagonistas del libro.
¡Esperamos que salgan muy bien!
Pastel de Streusel
La palabra Streusel procede del verbo alemán streusen, «esparcir», y se refiere a la cobertura de este pastel, que se esparce sobre la base de forma irregular para crear una textura crujiente y desmigada muy parecida al crumble inglés. Esta receta básica permite muchísimas variaciones, como, por ejemplo, añadir fruta fresca, mermelada o crema pastelera, entre la base y el Streusel.
Ingredientes
Para la base:
300 gr de harina
100 gr de azúcar
100 gr de mantequilla pomada
4 huevos
2 cucharaditas rasas de levadura
Una pizca de mantequilla para untar el molde
Para el Streusel:
200 gr de harina
250 gr de azúcar
2 cucharaditas de azúcar avainillado
250 gr de mantequilla
Preparación
Para la base:
Batir la mantequilla. Añadir los huevos y el azúcar. Mezclar aparte la harina y la levadura, tamizarlas y añadirlas a la masa poco a poco. Extender la masa sobre una fuente previamente untada con mantequilla.
Para el Streusel:
Tamizar la harina en un bol por separado y añadir el azúcar y el azúcar avainillado. Cortar la mantequilla a dados, e incorporarla a la masa, creando una textura de migas, que pueden tener el grosor que se desee. Distribuir el Streusel sobre la base.
Tarta de yogur y mandarina
Para esta receta ligera y refrescante puedes utilizar todo tipo de fruta según la temporada (las frutas que sueltan mucho jugo, como las moras, le darán un color muy bonito). Otra opción que le va muy bien es la fruta en conserva, como el melocotón en almíbar.
Ingredientes
Para el bizcocho:
4 cucharadas de azúcar
2 cucharadas de aceite
5 cucharadas de harina
3 huevos
Una pizca de sal
1 cucharadita de levadura
1 cucharadita de azúcar avainillado
Para la cobertura:
500g de yogur natural
2 vasos de nata montada
500 gr de mandarinas peladas
150 gr de azúcar
2 hojas de gelatina
Preparación
Mezclar todos los ingredientes del bizcocho y verter la mezcla sobre un molde redondo forrado con papel de cocina. Meter al horno precalentado a 180 °C alrededor de 15 minutos y dejar enfriar.
Mientras, batir el yogur con el azúcar y mezclarlo con las mandarinas troceadas. Ablandar y disolver la gelatina según las instrucciones del paquete y añadirla a la mezcla de yogur. (Para evitar que se hagan grumos, se puede echar un par de cucharadas de la mezcla de yogur a la gelatina cuando aún esté caliente, remover bien y luego devolverlo todo al resto de la mezcla). Añadir poco a poco la nata montada y disponer sobre el bizcocho ya frío. Antes de servir, dejar como mínimo un par de horas en la nevera (lo ideal es toda la noche).
Tarta de coco
Aunque el coco parece un ingrediente demasiado tropical para el frío clima germánico, se utiliza a menudo en la repostería, como esta rica tarta de coco, hecha con muy poca harina lo que le da una textura muy esponjosa.
Ingredientes
4 huevos
125 gr de mantequilla pomada
100 gr de azúcar
2 cucharadas de ron
50 gr de harina
1 cucharadita de levadura
200 gr de coco rallado (y un poco más para decorar)
2 cucharadas de mermelada (por ejemplo, de albaricoque)
Mantequilla y harina para untar el molde
Preparación
Precalentar el horno a 180 °C. Separar las yemas de las claras y batir las claras a punto de nieve. Mezclar las yemas de huevos con una cucharada de agua, añadir la mantequilla y el azúcar. A continuación echar el ron, la harina, la levadura y el coco rallado e incorporar con cuidado y mezclando siempre de fuera a dentro las claras a punto de nieve.
Untar un molde (puede ser de plum-cake, o un molde redondo pequeño) con mantequilla y cubrir con harina. Verter la masa, alisarla y dejar que se haga durante aproximadamente 35 minutos.
Mientras, calentar la mermelada con un par de cucharadas de agua hasta que se derrita. Una vez desmoldada la tarta, cubrirla con la mermelada y decorar con un poco de coco rallado.
Marmorkuchen o bizcocho de mármol
Este bizcocho bicolor, un clásico de la repostería alemana, se ha hecho famoso en todo el mundo. Cada familia tiene su propia receta. Aquí te presentamos una que apuesta por la combinación irresistible de vainilla y chocolate.
Ingredientes
130 gr de mantequilla pomada
180 gr de azúcar
1 cucharadita de azúcar avainillado
La piel rallada de un limón
2 cucharadas de ron
4 huevos
Una pizca de sal
200 gr de harina
1 cucharadita de levadura
100 ml de leche tibia
30 gr de cacao puro sin azúcar
Preparación
Batir la mantequilla (es importante que esté muy blanda, para ello hay que sacarla de la nevera por lo menos 12 horas antes) con 100 gr de azúcar y el azúcar avainillado. Sin dejar de batir, incorporar la ralladura de piel de limón y el ron hasta obtener una mezcla cremosa.
Separar los huevos e incorporar las yemas a la masa una a una. Batir las claras a punto de nieve con la pizca de sal. Antes de que monten del todo, añadir el azúcar restante y acabar de batir.
Mezclar la harina con la levadura e incorporar a la masa, tamizándola con un colador, alternando con la leche y las claras a punto de nieve unas tres o cuatro veces. Mezclar a mano con delicadeza con una cuchara de madera. Una vez bien mezclado, untar el molde (un molde de roscón es el más apropiado para esta receta) con mantequilla y harina, y verter dentro la mitad de la mezcla.
A la mezcla restante se le añade el cacao, también tamizado con un colador para evitar grumos. Verter sobre el resto de la masa en el borde y pinchar repetidas veces con el tenedor haciendo un movimiento en espiral para crear el efecto marmolado.
Meter al horno precalentado a 180 °C durante unos 45 minutos hasta que esté bien hecha (si al pincharlo con un palillo, este sale seco, es que está en su punto). Hay que vigilar que no se dore demasiado para que no quede seco. Dejar enfriar antes de desmoldar.
Tarta de queso
La tarta de queso es una receta que también tiene muchas versiones distintas alrededor del mundo. Aquí presentamos la receta tradicional alemana, que incorpora nata en la masa.
Ingredientes
Para el bizcocho:
2 huevos
2 cucharadas de agua caliente
100 gr de azúcar
1 cucharadita de azúcar avainillado
75 gr de harina
50 gr de maicena
1 cucharadita de levadura
Para el relleno:
8 hojas de gelatina neutra
500 gr de cuajada o queso batido
200 gr de azúcar
1 limón
375 ml de nata para montar
Preparación
Para el bizcocho:
Batir los huevos hasta que monten. Añadir el agua y seguir batiendo. Cuando se haya obtenido una mezcla esponjosa, incorporar el azúcar y el azúcar avainillado en pequeñas cantidades y batir hasta que el azúcar se disuelva del todo. Mezclar aparte la harina, la maicena y la levadura. A continuación, incorporar a la masa con cuidado.
Forrar el fondo de un molde redondo con papel de horno y verter la masa. Meter al horno precalentado a 200 °C entre 20 y 30 minutos. Una vez enfriado, cortar en dos capas.
Para el relleno:
Reblandecer la gelatina en agua fría.
Mezclar la cuajada o el queso batido con el azúcar, la piel rallada y el jugo de limón. Deshacer la gelatina en unas 5 o 6 cucharadas de agua caliente e incorporar a la masa de queso. A continuación, añadir la nata montada.
Colocar una de las mitades del bizcocho en el fondo de un molde redondo desmontable. Verter encima la mezcla de queso y nata y cubrir con la otra mitad. Dejar enfriar varias horas en la nevera antes de servir. Puede decorarse con azúcar glas.
Gugelhupf
Este nombre en apariencia difícil de pronunciar se debe a su peculiar forma de roscón alto: la palabra Gugel es un término utilizado en la Alemania medieval para referirse a un sombrero, y Hupf, «salto», hace alusión a que la masa «salta» del molde dentro del horno. Aunque se prepara con un molde especial, puede utilizarse cualquier molde de roscón.
Ingredientes
250 gr de mantequilla pomada
250 gr de azúcar
2 cucharaditas de azúcar avainillado
6 huevos
350 gr de harina
1 cucharadita de levadura
250 ml de nata montada
2 cucharadas de ron
Preparación
Separar los huevos.
Mezclar la mantequilla con el azúcar, el azúcar avainillado y el ron hasta que quede una mezcla esponjosa. Añadir las yemas de los huevos una a una.
Por separado, mezclar la harina y la levadura y echar a la mezcla mientras se tamiza con un colador, al mismo tiempo que se alterna con la nata montada.
Batir las claras a punto de nieve e incorporarlas a la mezcla con cuidado.
Untar un molde de roscón con mantequilla y harina, verter la masa y meter en un horno precalentado a 180 °C alrededor de 50 minutos.
Una vez enfriado y desmoldado, se puede decorar con azúcar glas o con cobertura de chocolate.
Pastel de cerezas
Esta receta sencilla y muy rápida de preparar es ideal para el verano. Aunque pueden utilizarse cerezas en conserva, las cerezas de temporada garantizan un resultado espectacular.
Ingredientes
100 gr de mantequilla
150 gr de azúcar
3 huevos
1 cucharadita de azúcar avainillado
El zumo de un limón
150 gr de harina
1 cucharadita de levadura
350 gr (aprox.) de cerezas (si se utilizan cerezas en conserva, tienen que ser deshuesadas)
Preparación
Mezclar todos los ingredientes excepto las cerezas con las varillas eléctricas hasta que quede una masa homogénea.
Untar con mantequilla y enharinar un molde redondo (o forrarlo con papel de cocina), en el que se vierte la mezcla.
Deshuesar las cerezas y secarlas con papel de cocina. A continuación, distribuirlas en el molde sobre la masa.
Meter el molde en el horno frío y encenderlo a una temperatura de 180 °C. Dejarlo que se haga durante unos 45 minutos. Para saber si está en su punto, pincharlo con un palillo y comprobar que sale seco.