Para 6 personas
Para los largos y fríos inviernos en el rancho. Una cantidad extra de vino también ayuda.
4 cucharadas soperas de harina
900 g de carne de ternera (solomillo)
4 cucharadas soperas de mantequilla
2 cucharadas soperas de aceite de oliva
2 chalotas troceadas
3 dientes de ajo picados
225 g de champiñones blancos
120 ml de vino tinto
media lata de 300 ml de consomé de ternera
sal y pimienta al gusto
2 ramilletes de tomillo
pasta al huevo cocida para acompañar
Espolvorear dos cucharadas de harina sobre la carne y rebozarla en ella hasta cubrirla.
En una cazuela pesada o una olla de hierro, derretir la mantequilla y el aceite a fuego fuerte. Añadir la carne en trozos en varias tandas y dorarla por ambos lados, teniendo especial cuidado de no echar demasiados trozos en la cazuela. Freír unos minutos cada tanda. Colocar en una fuente cuando esté hecha.
Bajar el fuego a la mitad y añadir las chalotas y el ajo. Saltear unos dos minutos. Añadir los champiñones y cocinar durante dos minutos más. Verter el vino, el consomé y 120 ml de agua.
Echarle sal y pimienta al gusto y remover. Llevar a ebullición y añadir la carne dorada y los jugos de la fuente. Bajar el fuego y añadir el tomillo.
Cubrir y cocer durante hora y media o hasta que la carne esté tierna. En un recipiente pequeño, mezclar el resto de la harina con 60 ml de agua y verter en el estofado. Cocinar durante diez minutos hasta que el caldo espese. Apagar el fuego y dejar reposar quince o veinte minutos antes de servir.
Acompañar con pasta al huevo.