Gracias a Robert Gootlieb de Trident Media Group, LLC y a todos los maravillosos agentes que trabajan con él en Trident Media Group. Gracias también a todos los libreros que me ayudaron a encontrar material poco conocido sobre antiguas reliquias; a los agentes de viajes que comprobaron que el tránsito era posible en las esquinas más lejanas del mundo; y a mis amigos en el orden público que me sacaron al campo de tiro y me enseñaron las armas que describo en este libro. Me gustaría también dar las gracias a mi editor Bob Gleason y a Linda Quinton de Tor, por su gran aportación y ayuda en este libro.