Absolutamente seguro

He aquí otra (la cuarta y última) de las miniaturas de este libro. Esta es mi favorita de las cuatro, y la situaría entre las más favoritas de todas las historias cortas-cortas que yo haya escrito nunca.

Si no se dislocan ustedes el diafragma gruñendo, y resoplando, y haciendo otros ruidos semejantes y poco educados cuando hayan terminado, me sentiré enormemente decepcionado.