Pregunté si rezar,
pero dijo el brahmán:
—Por nada reces, di
cada noche en la cama:
“He sido rey,
he sido esclavo,
y nada hay,
bufón, pillo o truhán
que no haya sido,
y aun así mil cabezas
tuve sobre mi pecho.”
Para apaciguar los días
turbulentos de un mozo,
Mohini Chatterjee
dijo esto o algo parecido.
Yo añado, comentándolo,
“Los viejos amantes aún pueden
tener lo que el tiempo les negara:
tumba sobre tumba se amontonan
para complacerlos;
sobre la ennegrecida tierra
las viejas tropas desfilan
parto sobre parto
para que ese cañoneo
mantenga a raya al tiempo.
La hora del nacer y del morir
se unen o, como dicen los sabios,
con eternos pies baila el hombre.