Cuando el célebre general griego Arístides supo por uno de sus informadores que en su campamento se había infiltrado un espía persa, mandó que todo

soldado, constructor de escudos, médico y cocinero diera razón de algún otro de los presentes.

Así se descubrió al espía.

Al mes siguiente, los griegos derrotaron al ejército invasor persa en la batalla de Maratón, en el 490 a. C.

De la traducción del Libro de los Espías

La inteligencia estratégica es el poder de conocer las intenciones de tus enemigos.

New York Times, 14 de mayo de 2006