Elena Rincón es una juez de unos 35 años que vive en Fuencarral (Madrid). Su padre ha muerto hace unos meses y se acuerda de él con una mezcla de culpa y resentimiento. Si la muerte de su padre le priva del pasado, su relación con el forense carece de futuro. Intuye, sin embargo, que está al borde de algo nuevo y se fructifica en el metro, cuando ve, sentada frente a ella, «un ángel sin alas, una diosa», «una mujer cuyas facciones ella había soñado para sí misma en un tiempo remoto».

No mires debajo de la cama es una novela acerca de la simetría y desigualdad de las parejas y de la búsqueda universal de compañía y afecto. Y, como es habitual en el autor, acerca de esa otra realidad que se muestra diariamente a través de los pliegues de las que creemos certezas inamovibles. Con un dominio absoluto de sus materiales novelescos y una combinación de registros que abarca desde el drama al humor, pasando por la ironía y la paradoja de raigambre surrealista, Millás ha conseguido crear una apasionante historia que prende al lector con la viveza de su ritmo y lo insólito de sus sorpresas.